Pocos minutos después de las 10:45 de la mañana, hora española, los Reyes han abandonado la embajada de España en Londres, donde se están alojando, para dirigirse a Westminster.

Las miradas se han dirigido a la Reina, que ha vuelto a sorprender gracias a su estilismo. Si bien el color rojo era una de las grandes apuestas para su vestuario en este día histórico, finalmente Letizia ha escogido un tono que ha bañado sus últimos looks, el rosa. La elección no podía ser mejor, pues ha realizado un guiño a la moda latina al apostar por un conjunto de la diseñadora venezolana Carolina Herrera.

Se trata de un dos piezas de aspecto clásico compuesto por una chaqueta de hombros marcados, manga larga, bordados flores y botonadura a tono, que destaca por su bajo peplum, que aporta volumen a la pieza. En cuanto a la falda, esta es de talle alto, bajo midi y un discreto vuelo. Cabe recordar que la firma Carolina Herrera pertenece desde el año 1995 al grupo español Puig, por lo que su elección se puede entender también como un gesto de apoyo a la moda española.

La Reina lo ha confirmado con el complemento que más ha llamado la atención, y que además era exigido por protocolo, el tocado, ha optado por una firma made in Spain, Balel, tras la que se encuentra la sombrerera Isabel Terroso. Se trata de un sombrero confeccionado en sinamay y cubierto con un velo vintage rosa, a tono con su traje de chaqueta.

Como pendientes, los chatones pertenecientes al joyero real, concretamente al lote de pasar. Estos son también un guiño a la corona británica, pues su primera dueña fue la reina Victoria Eugenia de Battenberg.

El rey Felipe ha lucido el uniforme de capitán general del Ejército de Tierra, el mismo que llevó en su propia proclamación. Al igual que su esposa, su vestuario también ha tenido un guiño, en su caso hacia la Casa Real británica, pues ha portado dos condecoraciones británicas, la de la Orden de San Jorge y la de caballero de la Orden de la Jarretera, la máxima distinción británica.

Los reyes de España, Felipe y Letizia, en la coronación de Carlos III. (RTVE)

Esta última le fue entregada por Isabel II en junio de 2019 y es la orden más antigua del país. Su símbolo es una jarretera representada por una correa con hebilla de terciopelo azul con el lema de la orden en letras de oro “Honi soit qui mal y pensé”, que significa “Que se avergüence el que haya pensado mal”.

También ha llevado la condecoración del Toisón de Oro y la banda azul y blanca de la Orden de Carlos III, cruzada en el pecho. Tampoco ha faltado el fajín rojo de Capitán General y las bocamangas que le distinguen como Capitán General del Ejército de Tierra.

Evento ineludible

Terminada la coronación de Carlos III, y tras asistir a la recepción que el ya coronado rey británico ofrece en el palacio de Buckingham a sus invitados, Felipe y Letizia regresarán a España.

Felipe VI tiene marcado en su agenda un evento ineludible: la final de la Copa del Rey de Fútbol. Se trata de un evento al que siempre acude, no solo porque lleva su nombre, también porque es un gran forofo de este deporte. Para llegar a tiempo, todo apunta a que viajará directamente de Londres a Sevilla, donde va a tener lugar la final del campeonato, en el que a las 22 horas se enfrentarán el Real Madrid y el Osasuna en el Estadio de la Cartuja.