Córdoba Fashion Week: cómo es la marca que irrumpe en la moda con guardapolvos de diseño

Daniela Alazia es la diseñadora detrás de esta propuesta “disruptiva” que podrá verse este viernes durante la segunda jornada del Córdoba Fashion Week.


Moda

Fuente: La Voz

Es de joven, intervenía y cosía su ropa, y hace cinco años comenzó a realizar vestidos de novias, de quinceañeras y de egresadas a medida, hasta que una necesidad personal la llevó a dedicar su atención a prendas muy específicas: los guardapolvos y las chaquetas de diseño.

“Lo de los guardapolvos es algo bastante reciente, comenzó en septiembre del año pasado. Soy docente y necesitaba renovar el guardapolvo, pero no encontraba nada que me representara, ni que me gustara ponerme”, recuerda Daniela en diálogo con VOS y precisa que ese fue el disparador para este proyecto que el viernes se lucirá en la pasarela del Córdoba Fashion Week.

“La idea fue lanzar Da Domani para darles a aquellas mujeres que se desempeñan en este tipo de actividades la posibilidad de lucir una prenda única, con ciertos detalles de diseño, para que también se sientan lindas”, reconoce y aclara: “Pero además de ser un guardapolvo que cumpliera con esa cuota de frivolidad de querer estar y vernos lindas, mi intención también era contar una historia, por eso cada uno de los modelos lleva nombres de mujeres que se hayan destacado en el área de las ciencias”.

“Da Domani significa hacia el mañana. La idea es proyectar a una mujer moderna, dinámica, emprendedora, capaz de valerse por sí misma, a la que el presente no la condicione. Con la mirada hacia adelante, hacia el mañana, pero sin dejar de tener presentes a las mujeres que nos precedieron en el campo de la ciencia. Porque todas las mujeres que hacemos ciencia hoy lo hacemos con cierta libertad y tenemos un lugar en este mundo. Pero no siempre fue así”, apunta.

–Los guardapolvos o las chaquetas tienen una razón de ser, una funcionalidad práctica además de estética. ¿Cómo se combina estética con practicidad?

–La verdad que este requiere probar constantemente y tener presente que distintas profesiones tienen diferentes requerimientos. Algunos más exigentes que otros. Lo que va bien para una a lo mejor no le va bien a otra, y así. El guardapolvo de una docente tiene determinadas características que por ahí no va a tener el de una enfermera, el de una médica, el de una persona que trabaja en medicina estética, o bien el de una recepcionista de un centro de salud. Trato de hacer un poquito de todo, pienso en diseños teniendo en cuenta las necesidades de las distintas profesiones. A los guardapolvos que no son de laboratorio les podemos dar una vueltita más al diseño, pero de todas maneras todos los diseños se trabajan con telas antimanchas, de Acrocel, y todos blancos.

–¿Cómo es tu modalidad de trabajo? Una vez que tenés los diseños, cómo sigue el proceso productivo.

–En mi taller de casa, trabajo sola, pero luego las prendas se terminan en un taller de confección, trabajo con una cooperativa textil que hay en una localidad cercana. Después tengo gente que me acompaña desde el punto de vista de la administración, del marketing, y gente que me asesora un poquito.

–Tu propuesta es muy específica y además es una rareza dentro de un evento como el Córdoba Fashion Week. ¿Cómo se gestó tu incorporación a la grilla?

–Vi la publicidad y me contacté con los organizadores. Estuvimos charlando un poquito, les conté cuál era mi idea, de qué se trataba mi marca y aunque teníamos algunas dudas, me parece que va a salir algo lindo. La verdad es que es disruptivo presentar una colección de guardapolvos en un evento como este. Al ser algo tan distinto, creo que vamos a tener una buena repercusión.

Originalmente, Daniela trabajaba con cuatro modelos de guardapolvos, pero para este evento creó 10 modelos nuevos que serán presentados en pasarela. “Eventos como estos para nosotros son muy importantes. Uno de nuestros mayores desafíos es establecer nuevos mercados y afianzar la marca en los lugares donde ya estamos, es una pantalla para que las personas dirijan su mirada hacia nosotros. El interior muchas veces está olvidado y esta es una manera de decir: ‘Acá estamos, estamos presentes, estamos haciendo cosas y podemos hacer cosas muy interesantes’”, explica.

“En pueblos como el nuestro, la falta de oportunidades para los jóvenes es notoria. Aquí todo emprendimiento, proyecto de creación o de fabricación, además de ser una fuente de trabajo, es una fuente de inspiración para otras personas. Los lleva a decir ‘Nosotros también podemos’”, analiza. Y sigue: “Yo, además, doy clases en un colegio secundario y el mensaje que trato de dejarles va por ahí. Todos podemos, todos tenemos la capacidad de hacer algo, todos podemos crear algo, todos podemos emprender. Sí, nos hacen falta muchas cosas, pero sin pasión y sin dedicación... sin eso, no vamos a ningún lado”.